Lo extraordinario se volvió ordinario en el Real Madrid

Así, como si no quiere la cosa, o sí, los de Chamartín se vuelven a meter en una nueva final de “la competición del Real Madrid”. Porque sí, ya no caben dudas en el viejo continente, tampoco las había. Los blancos son los dueños dominadores absolutos de la Copa de Europa. Dentro de esta atribución de prestigio y grandeza hay varias notas de ayer que es correcto destacar.

90 minuti en el Bernabéu son Molto Longo

Esta frase se popularizó cuando Juanito, emblema del club, la soltó en 1986 en el momento de perder en la ida de una eliminatoria frente al Inter. En la vuelta, lograron vencer por 3-0. En la era de Zidane, cuando empezó el club a ganar sin piedad, se volvió a recordar. Las remontadas empezaron a malacostumbrar a los fans del Real Madrid, que vieron cómo su equipo no sólo ganaba, sino que le daba la vuelta al luminoso en todas las eliminatorias. Y, desde ese momento, hasta ahora, lo extraordinario se volvió ordinario. El Madrid de los milagros lo mereció porque no solo fue "tirar de épica": fueron ganas de vencer, esfuerzo, mérito y salir a agobiar a los bávaros desde el primer minuto. La definición costó con un balón de Vinicius que se estrelló en el palo y un posterior remate de Rodrygo que logró atajar un Neuer infranqueable. Pero, entró Joselu, carácter, ADN y sangre Real Madrid en vena, para alzar la voz y avisar al mundo: el Real Madrid viajará a Wembley a por su décimo quinta Champions League.

Hablemos del héroe inesperado de la noche

Hay tipos que sin saberlo sacrifican carreras por vivir un instante de éxtasis. A este club selecto pertenece desde anoche Joselu Mato, ese chico que se marchó del club de su vida por no tener un hueco en la primera plantilla. Trabajó duro en la sombra, vivió momentos difíciles, pasó por 9 equipos y regresó al club de Chamartín con 33 años para hacer realidad su sueño: jugar de nuevo para el Rey de Europa. Jugadores como él dejan una huella imborrable en los corazones de los seguidores. Protagonizó el doblete más importante de su carrera. Sacrificio y sudor por la camiseta de su vida.

Cuando Vinicius se dedica a jugar al fútbol…

Es MVP cuando no se mete en trifulcas, cuando no protesta al colegiado por acciones sin sentido, cuando no se mete con los jugadores del equipo rival, cuando se tranquiliza…. Protagonizó el encuentro de la temporada pese a tener una oportunidad vital en los primeros compases y no aprovecharla. En el día D estuvo al servicio de su equipo, fue el pupilo de Ancelotti que quiere ver siempre, el que cogió las riendas cuando más en contra se ponía la eliminatoria. Con 23 años, podrá ganar su segunda Champions League el próximo día 1 de junio. Uno de esos jugadores por los que pagas un ticket. No es fácil vivir con tanta presión en un club de leyenda ni tampoco jugar partidos cargados de tanta relevancia mediática y planetaria. En la entrevista postpartido, el brasileño quiso sumarle mérito al nuevo hito del club: "Es parte de este equipo, de vestir esta camiseta, después de jugar tantas veces en este campo, y lo vuelves a hacer. Esto es el Real Madrid, nunca nos rendimos, siempre creemos en nosotros, que nuestra afición va a venir con nosotros. Vamos a por la 15". Los blancos jugarán por primera vez en la historia en el mítico Wembley y dejar grabado de nuevo su nombre en la Orejona se ha convertido casi ya en una obligación.